Qué es el ácido salicílico, para qué sirve y cómo se usa
El ácido salicílico es uno de los más recomendados por los dermatólogos para su asociación al tratamiento de quienes tienen pieles grasas y con tendencia al acné. En este artículo se ha reunido información sobre el ácido salicílico para el rostro. Aquí encontrarás los principales cuidados y beneficios de este activo para la piel.
¿Qué es el ácido salicílico?
El ácido salicílico es un beta-hidroxiácido con acción queratolítica y antiinflamatoria. En términos sencillos, el ácido salicílico promueve una exfoliación suave y la reducción del proceso inflamatorio (provoca una leve descamación de la piel), ayuda a disminuir la producción de sebo, disminuye las imperfecciones del acné, desobstruye los poros y mejora la textura de la piel.
¿Cómo utilizar el ácido salicílico en la piel?
Se puede encontrar en varios dermocosméticos indicados para la rutina de cuidados diarios, como en jabones y lociones secantes (más adelante), en menor concentración.
Puede utilizarse en procedimientos estéticos, como los peelings químicos, para mejorar el aspecto de la piel y controlar el acné, reducir las arrugas finas y las manchas. También puede indicarse junto con otros tipos de ácidos, como el retinoico, según el caso y la indicación del dermatólogo.
Ácido salicílico para el rostro: ¿puede ser utilizado por las pieles grasas o acnéicas?
El ácido salicílico, junto con el ácido retinoico o el ácido glicólico es uno de los más recomendados para asociar al tratamiento de las pieles grasas con tendencia al acné. Exfolia, renueva la piel del rostro, elimina las células muertas y el exceso de grasa. El ácido salicílico actúa contra la formación de lesiones de espinillas, inhibe la formación de puntos negros y ayuda a controlar la producción de sebo.
Es importante destacar que antes de elegir dermocosméticos con ácido salicílico, es necesario consultar a su dermatólogo para una evaluación completa de su tipo de piel. Recuerde también que debe utilizar protección solar.
Contraindicaciones: los productos con ácido salicílico no están recomendados para las mujeres embarazadas.