Prevención y alivio del síndrome de ojo seco
El síndrome de ojo seco es una patología que ha aumentado su índice de ocurrencia en los últimos años, ya que una de sus causas es el trabajar durante tiempo excesivo en el ordenador, aunque su incidencia mayor se debe a factores como la edad o problemas hormonales.
Esta patología se presenta cuando el ojo no tiene la capacidad para producir la suficiente película lagrimal para mantenerse humectado y poder eliminar las partículas que tienden a introducirse en él, las lágrimas son esenciales para mantener una buena salud ocular.
Causas y síntomas asociadas a la aparición del síndrome
Tradicionalmente uno de los factores de riesgo que mayormente causan esta enfermedad es la edad avanzada, ya que cerca del 75% de las personas mayores de 70 años padece este síndrome, Los problemas hormonales son también una de las causas más frecuentes de su aparición, una gran cantidad de mujeres cuando atraviesan por la menopausia tienen a sufrir de este síndrome.
Trabajar durante largas horas frente al ordenador es una de las causas que ha tendido a aumentar en los últimos años la aparición de este síndrome en jóvenes e incluso en adolescentes, ya que se tiende a no parpadear lo suficiente para producir la cantidad necesaria de lágrimas para mantener los ojos humectados.
El uso de lentes de contactos y enfermedades como la diabetes, la disfunción tiroidea, el asma, el síndrome de Sjögren, el glaucoma, y las cataratas, son factores que pueden incidir de manera directa sobre la aparición de esta patología. También hay que mencionar los factores desencadenantes de tipo ambiental como la contaminación, los altos niveles de humo, el viento y los climas demasiados secos.
Síntomas
El síndrome de ojo seco se manifiesta inicialmente como la sensación de un cuerpo extraño en los ojos, que causa picores , visión borrosa e hipersensibilidad a la luz, el organismo genera un lagrimeo reflejo como respuesta inicial; cuando la patología avanza pueden aparecer microerosiones y ulceraciones muy pequeñas.
En su estadio más avanzado el síndrome de ojo seco puede causar úlceras en la córnea y pérdida en la agudeza visual, así como la aparición de infecciones en forma recurrente, si la patología avanza, se corre un serio riesgo de pérdida de la visión.
Consejos para prevención de este síndrome
Para prevenir la aparición del síndrome de ojo seco es importante:
- Mantener una dieta saludable en la que se incluyan alimentos ricos en vitamina A y betacarotenos, así como también en ácidos grasos omega 3.
- Descansar la vista de manera frecuente cuando se trabaja en el ordenador.
- No fumar, evitar el humo producido por el tabaco y el viento directo sobre los ojos.
- Evitar mantenerse por tiempo prolongado en ambientes muy secos o en aquellos en que se utilice climatización (aire acondicionado o calefacción).
Tratamiento del síndrome de ojo seco
El tratamiento para las manifestaciones iniciales de esta patología consiste en aplicar lágrimas artificiales como un sustituto de las lágrimas naturales, estas gotas están formuladas para recubrir la superficie ocular, manteniéndola hidratada, lo que ayuda a proteger el ojo; lo más recomendable es que sea un médico el que indique el tratamiento, ya que actualmente existen distintos tipos de lágrimas artificiales.
Si se presenta la aparición de erosiones o ulceraciones, por mínimas que sean, se debe realizar un implante de tapones lagrimales, que ayuda a mantener la humedad necesaria en el ojo. Cuando la enfermedad llega a estadios muy avanzados es necesario recurrir a un implante de tejido de placenta; este es un procedimiento clínico que debe ser efectuado por oftalmólogos especializados.
Sin embargo lo más recomendable ante la aparición de cualquier síntoma asociado a este síndrome es acudir al oftalmólogo, quien está capacitado para tratar de forma eficaz esta patología, evitando pueda avanzar y poner en riesgo la salud de nuestros ojos.